La Sierva de Dios Ma. Angélica Álvarez Icaza nació en la ciudad de México, el 17 de diciembre de 1887. Hija del Lic. Ignacio Álvarez e Icaza y la Sra. Carolina Icaza de Álvarez, fue la quinta hija del matrimonio. Sus hermanos: Manuel, José, Guadalupe y Mariano, antes de ella y los menores Ignacio, Luis, Juan (murió en la infancia) y Joaquín. Al nacer Conchita, su mamá la consagró a la Inmaculada Concepción de María; de la cual llevó el nombre; en los tres primeros años de su vida sólo la vistieron de blanco y azul en su honor. Fue bautizada el 10 de enero de 1888; sus padrinos fueron el Padre Antonio Icaza, hermano de su mamá y Loreto Álvarez Icaza de Puente hermana de su papá en el Sagrario Metropolitano. A los 7 años hizo la Primera Comunión el 12 de octubre de 1895 con su hermana Lupe, en la iglesia de Nuestra Señora de Balvanera, antes de comulgar, su hermana se acercó y muy bajito le dijo: "Pídele que seas monja" y ella le respondió también bajito: "No, yo mejor le pido ser santa". Ese mismo día se ofreció a Dios como víctima de amor por los pecados de los hombres. A los 10 años perdió a su mamá por lo que toda la familia se fue a vivir con las hermanas de su papá que eran solteras. Su educación fue muy cuidada, tanto de los mayores como de sus mismos hermanos, aún cuando ella siempre supo que le entregaría su vida a Nuestro Señor. A los 18 años, el 8 de enero de 1905 entró al Monasterio de la Visitación de Santa María en Morelia, Mich., al año de ingresar entró en una etapa de purificación que duró 7 años hasta el año de 1913. El 25 de marzo de 1914 grabó en su pecho el monograma de Jesús (JHS), el 9 de abril recibe las tres misiones que le encomienda Dios que son: Mostrar al mundo los encantos divinos de su amor, ser vivo retrato de Cristo y ser víctima de amor y expiación por los pecados del mundo, y el 20 de abril de ese mismo año recibe la insigne gracia del “matrimonio espiritual”. El 26 de septiembre de 1916 sale desterrada a España junto con toda la Comunidad ya que por la Revolución y la persecución religiosa les quitan el Monasterio. Llegaron al Monasterio de Madrid y después las mandaron a Bonanza y por último al Puerto de Santa María. Durante los 32 años que vivió en el exilio sufrió muchas enfermedades la peor de todas fue “Tuberculosis en los huesos” la cual le destrozó la columna vertebral y vivió con un corsé de lámina todos los años que siguieron hasta su muerte. Después de muchos sufrimientos el 27 de junio de 1948 regresa a México acompañada de 7 hermanas españolas a fundar nuevamente la Visitación, la cual se instala después de haber vivido unos meses en la Colonia Juárez en la casa de su cuñada Dolores Moncada, viuda de José Álvarez Icaza; en la calle de Campana No. 47, Col. Insurgentes Mixcoac y donde hasta la fecha está la Comunidad. Muere a los 89 años el 12 de julio de 1977, dejó un gran legado escrito en su “Diario Espiritual” para mostrar al mundo los Encantos Divinos del Amor de Dios. El 8 de mayo de 1985 se solicitó permiso para exhumar sus restos del Panteón Español y así iniciar el proceso de canonización; éste se abrió el 2 de julio de 1988. En septiembre de 1993 se entregó el proceso a Roma. Actualmente se están estudiando sus escritos en Roma; hay un grado de dificultad por las gracias místicas que recibió durante su vida ya que hay algunas nunca vistas. Necesitamos pedirle mucho al Espíritu Santo para que ilumine a los miembros del Tribunal y el proceso siga su cauce.